Mesegue Logo White

¿Qué significa ser moderno?

Cuando pensamos en un espacio moderno, imaginamos un entorno neutro, muy lineal, con espacios muy definidos por su simplicidad y estructura. Para entender este concepto en la historia, echaremos un vistazo atrás.

En el siglo XX, la modernidad se relacionaba con lo novedoso, con aprovechar al máximo los nuevos y mejores métodos y materiales, pero la obra de Mies van der Rohe en su pabellón de Barcelona (1929) con la utilización del vidrio y la piedra como principales protagonistas marcaron un antes y un después en el mundo del espacio interior. La verdadera importancia de Mies, era considerar que un material por sí mismo, con su textura natural, puede ser hermoso sin nada más, sin añadir ningún otro tipo de decoración. «Menos es mejor» Y esta postura marcó una pauta decorativa en el estilo de la época que ha influido hasta nuestros días.

Por esta misma razón, la construcción de un mueble que realce la propia calidad del material que lo forma: Su chapa natural, el tacto aterciopelado de la laca o la elección de un color acorde con el entorno, son características que valoramos de nuestros muebles.

Al final, la realidad de un espacio moderno va a presentar la justa yuxtaposición de todos los elementos: Los materiales que construyen el espacio: Una pared, un vidrio, un revestimiento de piedra, una textura en la pared, etc… Y el mobiliario que destaca por su acabado, que destaca por su madera, por su forma o por su color.

Todo en perfecto equilibrio o armonía, espacio y mobiliario, para ofrecer un entorno agradable, relajante, con un amplio abanico de estilos y técnicas y, como solemos decir, MODERNO.